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  Autor Francisco Cappellotti
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Sansimon en plumas

Los pibitos del Ekisman…

 

 

Ahí van como heladitos de mierda con pintitas de oreja de chancho. Ahí callan antes de irse a dormir para darle lugar a sus pecados. Siempre ellos tan puntuales con la navaja y la pistola a media ver.

Así te esperan angelito sin cielo. Con sus manos llenas de sangre y con el miedo hasta en el culo por si  los fletean del planeta. Y por solo estar ahí (la pena es por sus gustos parecidos) y sin más que por no faltar un día a la vida misma (en algo se parecen).

La calle esta gris y los chaparrones se presentan como animadores del valet. Las viejas del barrio ya ubicadas con los ojos sobre las hendijas de las ventanas, observan cómo van llegando los “parecidos”. El súper de la leche vencida no es más que la foto que saldrá en el diario de mañana. La pasta que quema es la que está ahí adentro. Ahí donde las balas van tomando calibre mientras los termidores empiezan a mojar el bizcochuelo.

 

Y ahí van los modales de los sin recibo…hasta la fotocopia falla en esta ciudad.

*            *            *

Esta vez, por fin la Prisión, te va a gustar…

 

Ahí estás borrachín!! …Y qué bien te sientan los 3 acentos en el orto. Vos sabés que un negro fiel nunca olvida una promesa y mucho menos una traición. Vos, de mientras…, andá a chuletearle el culo al amigo del fiscal, que siempre te promete y mucho más de siempre, te deja flaco…anda nomás, perejil. Pensá también en las mocosas que dijeron conocerte bien y que ahora se las juegan en primera de la mano del wisky más berreta. (Ésas si que nos jodieron la sopa).

Hasta siempre amigo…hasta dentro de unos años.

Y el pescado con el dedo más sensible de “Villa La Marchanta”, encontró asilo en la Prisión de Barbacoa. Así recuerdo su entrada al Reality New Prision. Así recuerdo haberlo visto entrar por esa puerta tan fácilmente.

*           *           *

Mi sanbuch( e )ito redentor

 

“Dale, piscuí !! montemos coche y piremos de acá. Dale, pibe que esos cuernos te cagan a fiebrazos. Ya son más de las cinco y ese caudal no aparece, Che… Dale, che, dale que esto se esta poniendo chino”…dale, papá!!

Esta mostaza se estaba poniendo picante para los dueños del delito mal organizado. Hasta los caños de los fierros sabían que estos guachos estaban fuera de calibre, (lo mismo sabía o creía saber las luces del Siena ese prestado). Todo era tan impredecible que hasta el desayuno parecía inmemorable.

No era un día más para estos mal rankiados del crimen. Sus sesos ya no procesaban la cosa. Ellos querían cagarse de frío ajeno. Querían ser los responsables en las noticias de las nueve. Y como en el membrillo duro de estos lauchas, el tango lo silbaba el diablo, todavía quedaban esperanzas de bailar un rato más con la más fea. Habían salido con ganas de hacer un poco de ruido. “Hoy vamos a cantar nosotros”…se decían estos cosanostras de ficción.

Mientras que en la rotisería, las liebres flacas de la Ley, entre vista y vista, se comían “uno” de jamón y queso. Y viendo todo, siempre menos lo suyo, no perdieron el estilo y se la jugaron como Dios manda…y entonces se comieron otro, pero esta vez, sorteando la suerte de la feta del queso ese, que todavía no sabían cómo compartir.

 

Incompleto y sin corregir

*          *            *

Angelito nocturno

 

Tenés la guita acá y el Don de ser…”quien manda en esta puta fiesta”, sos auto que anda bien en rectas que no saben mucho de las curvas. Te das de “no me doy”, pero sabes…sos cómplice de mis sonrisas…

Te doy lo que puedo dar, palabras que vos me das y algunos besos que llegan con retraso…

No ves (aún no ves!!), y parpadeas de a ratos que te causan risas…decís: “esto me hace bien” mientras no llegan las caricias que te cuentan los lunares.

Sos la dueña del sofá??? Con ojitos de Tissue que te acarician cada gesto…y un pelo que enamora con mirarte.

Vas a cambiar la piel…”en eso estás? ”, y siempre masticando fiebres…te das de “no me doy”, pero sabes…que no se cuentan los bostezos…

No te pienso por pensar…no me sienta bien mentirme así

!!

Pones tu cara ahí (refunfuñas?)…, y el gato que se come al perro.

El tiempo queda ahí…vos te acordás? dijiste señalando el suelo.

Sos cocodrilo que no duerme bien, pero que sabe de pichichos

que duermen besos que se pierden entre despedidas no muy dulces…

Te queda una canción sin predicar y mucha geta de muñeca,

Hay mañas que se van perdiendo…y aquí, la parleta se hace aguda.

La virgencita pierde un azulejo…

…y gana un admirador que queda quieto ante “su” tanta belleza de mujer.

Prohibido esta prohibir…

 

 

 

 

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